El tema de la novela es la amenaza a la que tienen que hacer frente los dioses olímpicos: dicha amenaza es una conspiración cuya finalidad es el derrocamiento del mismo Zeus, soberano de los dioses. El instrumento de la conspiración es Tifón, la criatura más poderosa a la que los dioses han tenido que hacer frente desde su victoria contra los Titanes (encabezados por Cronos, padre de Zeus). La conspiración fue llevada a cabo por Gea (divinidad que personifica a la tierra), abuela de Zeus cuyo objetivo es el exterminio de los dioses olímpicos y de la mayor parte de las criaturas terrestres, incluidos los humanos.En general, me pareció una novela muy entretenida, ya que aborda de manera muy interesante un tema tan apasionante como la mitología griega. Los protagonistas no son otros que los dioses olímpicos griegos, especialmente Zeus. En esta novela aparecen humanizados y sus poderes, pese a ser claramente sobrehumanos, parecen bastante limitados, desde mi punto de vista. Incluso su inmortalidad llegó a ponerse en duda en algunos momentos de la novela. Los dioses supremos del Olimpo, en mi opinión, aparecen demasiado humanizados. El autor, Javier Negrete, ha modificado algunos detalles de algunos mitos pero, aún así, ha intentado ser lo más fiel posible a dichos mitos y, en ese sentido, hizo muy buen trabajo.
En general, me pareció una novela muy amena y entretenida que aborda de una manera interesante temas recurrentes de la mitología griega, que acompañan a una trama fascinante que nos adentra en una lucha de poder entre los legendarios dioses griegos y Gea, ayudada por su instrumento de poder, Tifón.
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