Este libro me sirvió, una vez más, para demostrarme que nada es para siempre, que la vida da muchas vueltas y, aunque parezca un tópico, que la belleza está en el interior y de cómo las personas somos capaces de ocultar el dolor y la verdad.
Me mostró lo estúpidas e irracionales que son muchas de nuestras actitudes, las de los adolescentes, cuando tenemos problemas y la importancia que otorgamos a situaciones que en realidad no la tienen.
Otra faceta que destacaría es la relación que el autor establece entre la famosa obra de Shakespeare y la vida de esta chica.
Recomendaría este libro a a todas las chicas/-os de nuestra edad. Uno de los motivos es que resulta vergonzoso ver reflejados muchos de nuestros comportamientos y actitudes ante las dificultades y de algún modo creo que podría ayudar a rectificarlos o, por lo menos, a tomar conciencia de ellos.
Por CRISTINA LÓPEZ, 1º de BAC
Me mostró lo estúpidas e irracionales que son muchas de nuestras actitudes, las de los adolescentes, cuando tenemos problemas y la importancia que otorgamos a situaciones que en realidad no la tienen.
Otra faceta que destacaría es la relación que el autor establece entre la famosa obra de Shakespeare y la vida de esta chica.
Recomendaría este libro a a todas las chicas/-os de nuestra edad. Uno de los motivos es que resulta vergonzoso ver reflejados muchos de nuestros comportamientos y actitudes ante las dificultades y de algún modo creo que podría ayudar a rectificarlos o, por lo menos, a tomar conciencia de ellos.
Por CRISTINA LÓPEZ, 1º de BAC
Es un libro bastante entretenido y de fácil lectura puesto que tiene un vocabulario sencillo y no se precisa de conocimientos específicos para comprenderlo ya que trata un tema muy cercano a la realidad.
En mi opinión, el autor pretende que al final del libro saquemos una especie de moraleja. La protagonista está buscando algo que resulta que tiene más cerca de lo que ella cree; intenta encontrar respuestas a todas las preguntas que se hace sobre lo que le está pasando pero sólo la persona a la que espera se las puede contestar, de lo que no se da cuenta es de que esa persona lleva a su lado todo ese tiempo. También aparecen reflejados problemas de actualidad, como la importancia que le damos al peso. El autor también nos muestra los cambios que se llevan a cabo en la adolescencia: cambios de humor, indecisión...; para presentarnos dichos cambios, y que podamos ver como afectan a personas muy diferentes, crea dos personajes muy distintos: el de la protagonista y el de su mejor amiga, con personalidades completamente opuestas.
En conclusión, la moraleja es que a veces buscamos o esperamos cosas que están más cerca de lo que pensamos, sólo hay que saber mirar.
LUCÍA DÍAZ RODRÍGUEZ. 1º BAC A
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